Mujeres que miran al cielo
Mujeres con cuello de V
Por: Emma Glizette Caballero

¿Tienes situaciones difíciles que obstruyen tu caminar hacia promesas, metas, proyectos y sueños? ¿Has pasado por momentos de pérdida y de rupturas familiares donde tu familia, hogar, tu vida, era un hermoso edificio y hoy se ha derrumbado?

La única forma de superar pérdidas, cerrar ciclos y seguir adelante CONSTRUYENDO nuestra vida, es mirando a CRISTO.
No hay otra forma que no sea escondernos en él. PARA SANAR Y SUPERAR....Para entender lo vivido y fortalecidas ser equipadas de su propósito!

Poniendo la mirada en Cristo, vemos las cosas a su manera. Miramos hacia arriba, lo celestial, dando prioridad a lo eterno, no a lo terrenal, lo cual ha de pasar. Y superamos lo que a nuestra manera natural, parece insuperable.

Ahora hemos vuelto a vivir mediante la salvación, de modo que antes que andábamos como muertos en nuestra manera vana de vivir.  Y como muertos por la desesperanza. Heridos como pajaritos. Sin nido, sin alimento, aliento y sustento. Porque parece que perecemos en el aire de la falta de fe y de recuperar lo que jamás volveremos a alcanzar!  Hoy parece que hemos resucitado, como esta palabra nos hace ver. Estamos escondidos en Dios por medio de Cristo. 
¡Estamos en Cristo! 
Vivificados, nuevos, renovados y transformados por su gracia.

Y cuando Cristo venga seremos también con el, unidos y manifestaremos su gloria. Estaremos en esa plenitud de unidad eterna con el. Colosenses 3 2-4

Y esta palabra nos lleva a comprender esa necesidad de VIVIR EN EL... Cuando dejamos nuestra manera pasada de vivir, somos restaurados y comenzamos a vivir, para él, por él, y para él....

De este modo, puedo decir:  ¡PARA MI EL VIVIR ES CRISTO!

Porque vivimos deleitándonos en el y en su presencia. En esas cosas que desde esta tierra caminamos hacia el cielo. Y lo que recibimos del cielo, por él, manifiesta su gloria.
¡Gloria del Padre! Gloria que fortalece, porque la gloria de Dios, es CRISTO manifestado en medio de nuestras situaciones.

¡EL ES NUESTRO AMPARO, FORTALEZA Y GOZO. ES NUESTRA PAZ, SANADOR, AMIGO, PADRE ETERNO, CONSOLADOR!

Hermoso vivir estas promesas que como Mujeres nos fortalecen. En un mundo de tantas luchas y dificultades diarias, situaciones adversas y difíciles momentos. Podemos ser VENCEDORES por medio de Cristo. Por ello, es preciso poner la mirada arriba, fortalecidas haremos proezas, haremos la diferencia y estableceremos su reino. 

Llevando buenas nuevas y siendo nosotras mismas ejemplo de VIDA y esperanza mediante Cristo Jesús Señor nuestro. Te invito  a que puedas MIRAR un momento al cielo y sean abiertos los ojos de la fe, para ver el amor del PADRE que te ama y te hace saber que NO estas sola! que EL hace cosa nueva en ti, como dice Isaías 43: 18
y PUEDEN REGOCIJARSE en promesas que te encaminan, escondida en CRISTO, ESCONDIDA EN LA FE. 
A ir por lo que Dios preparó para ti... 

¡Recibe HOY un toque de esa su gracia que te fortalece y levanta tu vista para ver tiempos de esperanza y paz!
Con amor,


Tus amigas de Mujeres con cuello de V 


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