Entonces los hombres que habían sido espías entraron en la casa y sacaron a Rahab, a su padre, a su madre, a sus hermanos y a todos los demás parientes que estaban con ella. Trasladaron a toda la familia a un lugar seguro, cerca del campamento de Israel. 

Josué 6:23

Para los habitantes de Jericó, Rahab era una prostituta y para los israelitas sería catalogada como una prostituta pagana. Jericó era cuna de idolatría y paganismo. A tal punto, que las instrucciones de Dios para Josué eran de destruirla por completo, no tomarían nada de ella; sólo tomarían el oro, la plata, utensilios de bronce y de hierro para consagrarlo a Jehová. En Josué 6:17, indica que toda la ciudad era anatema a Jehová, excepto Rahab y su familia por que habían ayudado a los espías en su misión.

Rahab, era una vasija quebrada por su pecado. Así como nosotras también, en un momento dado, fuimos vasijas quebradas. Tuvimos fallas, claro que sí, yo las tuve también. Bendito amor, que me alcanzó y te alcanzó a ti también. Aún con nuestras faltas, el amor de Dios nos cubre de una manera especial. 

El pecado para el Padre, es pecado. No importa que ella haya sido prostituta, no importa que hubiese sido mentirosa, no importa que hubiese sido homicida, todos los pecados son pecados ante los ojos y los mandamientos de Dios.  No hay tamaño o un órden jerárquico en los pecados. Porque de lo vil y lo menospreciado toma el Padre para glorificarse y avergonzar a los poderosos. (1 Corintios 1:27-28)

Los planes de Dios fueron increíbles, ella pudo salir de Jericó y ser llevada a un lugar seguro. Así mismo sucede cuando venimos a Él, somos llevadas a un lugar seguro. A un lugar de transformación, de un nuevo comienzo y a un lugar donde estamos cerca de sus planes para nuestra vida.

Ella podía haber estado quebrada, pero a través de esta hendidura Dios se glorificó.  A través de nuestros quebrantos, Dios se glorificó. ¡Su Luz brilló!

Amiga:

Aún en medio de tus fisuras, Dios sigue siendo Dios. Su Luz brilla por cada hendidura que puedas tener. Su Luz brilla por encima de tus pecados, de tus faltas, de tu iniquidad, de tus debilidades, etc.

Para muchos Rahab era una prostituta, pero para Dios sería una nueva hija que sería salvada de la destrucción. De acuerdo a sus obras sería condenada, pero de acuerdo a su fe fue salvada. Dios siempre tiene un plan con cada una de sus hijas, áun cuando no han sido formadas ya su propósito estaba escrito. (Jeremías 1:5)

Cuando cada una de nosotras decidimos rendirnos a Dios, el nos lleva a un lugar de descanso. Rahab fue llevada al campamento de los hebreos. ¡Una nueva vida comenzó para ella! 

Exactamente, sucede con nosotras, somo llevadas a un lugar donde podemos emprender una nueva vida  y donde cumplir los planes y los sus sueños de Dios.

En este día, atrévete a escapar de Jericó, atrévete a escapar del pecado, atrévete a renunciar a los "títulos" que te ha puesto el mundo, atrévete a salir de los muros que te han rodeado para maldición. Átrevete a huir antes que sea demasiado tarde y venga el ejército de Dios a destruirla.

¡Una nueva vida te espera cuando decides creer!

Recuerda, que serás llevada a un lugar seguro.

Dios te bendiga.

Con todo mi amor,

Xiomy M.